Vacío
Vacío, así ha quedado nuestro piso.
Y así hemos quedado nosotros...
Mari llorando.
Bella buscándolos.
Rico aún no lo entiende.
Mi madre con mi padre en casa
llevándolo.
Y yo, yo consolando desconsolado.
Este día tenía que llegar, Wilson y Rayo ya no están en casa.
Nuestros últimos
conejos (así les llamaba mi padre) ya están en su nuevo hogar.
Hemos pasado de la alegría de ver a sus nuevos papis tan ilusionados con ellos, a la tristeza de ver su habitación vacía.
Lo que se ha vivido en estas 4 paredes...
Recogerla no ha sido fácil, ni para mi ni para Bella. Se resistía a quitar sus mantas, a no volver a encontrar su olor. Su cara lo dice todo... Pero con cariño y paciencia las cosas se llevan mejor.
-Volveremos a verlos Bella, te lo prometo!-
Como echaremos de menos esos momentos de sofá...
Rayo: -Sonríe Wilson que nos hacemos una foto!-
El consuelo, como en otras ocasiones, es que se quedan en buenas manos, y además muy cerca!! Así que podremos tener un contacto más próximo con ellos, verlos como acaban de crecer, etc. etc. Es una suerte para nosotros cuatro, bueno y para todos!
Pablo y Arantza disfrutar cada minuto de ellos como hemos hecho nosotros. Estos perros, nuestros Whippets Del Mar, son y serán de las cosas más bonitas que nos ofrece la vida. Vivirla intensamente a su lado!!
Rayo y Wilson, siempre juntos!
Y aquí finaliza nuestra aventura. Casi 3 meses de una experiencia inolvidable, tan intensa que no te deja descansar. Una experiencia única que no volverá a repetirse jamás, por ese motivo ha sido más especial, más sentida.
Todo esto nació de la unión de nuestros perros, del embarazo de Rico&Bella y del amanecer de ese 18 de febrero de 2014. Pero aquí no acaba la historia, ahora empieza una nueva etapa. Una etapa en la que esperamos seguir compartiendo con todos. Donde poder contar en más capítulos lo que nuestros perros iniciaron.
Así pues, que no se vaya nadie. Ahora tenemos 7 razones más para seguir escribiendo...
